Cómo lavar y cuidar la LANA

* No lavar con agua, lejía ni secadora.
* Colgar para secar.
* Planchar a una temperatura no superior a 110°C.
* Limpieza regular para protección contra polillas y almacenamiento en seco.
* Use un paño al planchar.
* Cuando almacene prendas de lana con otras prendas, envuélvalas en un paño limpio o papel para evitar la transferencia de fibras.
* Ventile una o dos veces al mes para evitar daños por polillas.
* Cuando empaque la ropa en una caja, déle la vuelta para evitar que se destiña y se arrugue.

SOBRE EL CUIDADO DE LA PRENDA

Lave menos, use más

Ten siempre en cuenta que lo mejor es lavar la ropa lo menos posible. Lavar la ropa con demasiada frecuencia puede tener un impacto negativo en su calidad al tiempo que ejerce presión sobre el medio ambiente y su billetera.

Elija productos ecológicos

Para proteger tanto tus prendas como el medio ambiente, opta por productos de lavandería ecológicos y evita la lejía y los suavizantes. Los detergentes ecológicos son tan efectivos como sus contrapartes convencionales, pero tienen la ventaja de estar libres de químicos y toxinas dañinos. La lejía puede dañar las telas, mientras que los suavizantes cubren sus prendas con una película delgada que puede impedir atributos positivos como la transpirabilidad y la absorción de la humedad.

Prendas secas de forma natural

El secado en línea evitará que su ropa se marchite o encoja cada vez que se envíe a secar, y también le ahorrará el costo de volver a comprarla con el tiempo. El viento y el sol trabajan juntos para crear la secadora totalmente natural definitiva para la ropa recién lavada y pueden proporcionarle ropa recién secada al aire, completa con un olor brillante y soleado.

lavarse conscientemente

Preste siempre atención a las etiquetas de cuidados individuales dentro de sus prendas, pero trate de lavar su ropa a bajas temperaturas (máx. 30 °C) o en frío. Asegúrese de llenar siempre su lavadora para evitar el desperdicio de agua y energía, pero no la llene en exceso, ya que las cargas pesadas pueden causar fricción y dar como resultado prendas mal lavadas o desgastadas. No olvide clasificar también su ropa según sus requisitos de cuidado. Separe los colores claros de los más oscuros, teniendo en cuenta las diferentes telas.